Integrarse en el Medio rural o el Medio urbano no está
reñido con la sostenibilidad y el disfrute.
Hola, estamos de despedidas, en primer lugar porque esta
semana decimos adiós
a Julio, mi mes favorito, y en segundo lugar, aunque no menos importante,
porque os digo adiós,
fieles y abigarrados lectores, mi
devenir como narrador de materiales y sistemas constructivos llega a su fin.
La decisión
está
tomada y, como sabéis,
yo, Rodolfo,
nunca doy marcha atrás (es de
cobardes), por supuesto, me llevo vuestro afecto, y vosotros mi sabiduría
(que no es poco).
Can Martí, en Ibiza
Ahora me toca dedicarme en cuerpo y alma a la idea que generó
estos hermosos artículos
(modestia aparte, claro). Me he dado, a partir de Septiembre, dos años
como máximo
para levantar un Hotel en una de las islas más increíbles
del Orbe: Gran
Canaria, (¿la conocéis?).
Allí
diseñaré
y llevaré
a cabo la proeza para la que nacimos los seres humanos: modificar el entorno, para bien siempre que se pueda, obviamente.
Can Martí en Ibiza
No obstante, antes de recluirme en tan singular paraíso
terrenal, he dado una “vuelta”
por varios hoteles del Mundo con una serie de características
que me generan agrado, y que tienen, todas ellas, algo que ver con el cuidado
de la naturaleza, si queréis
conocerlos …
¡quedaos
conmigo un poco más!
El primero de estos idílicos
espacios de ocio se llama Can Martí
y está
ubicado (como no) en Ibiza.
Can Martí en Ibiza
Una casa de 400 años
transformada en centro de disfrute y ocio, rodeada de 17 hectáreas
de naturaleza y totalmente concienciada de su labor. Todo respira la esencia de la piedra y la madera, los materiales constructivos
más antiguos, sin los cuáles, no se puede imaginar el
pasado… ni el futuro.
Las habitaciones tienen nombres de árbol: Olivo,
Granado, Pino, Algarrobo y Almendro. El contacto íntimo
con la naturaleza está garantizado
hasta en la piscina, la primera
bio-piscina natural de Ibiza, con mecanismos ecológicos
para conservar el agua pura y sin productos químicos.
Chiva-Som en Tailandia
De España, a Tailandia, ya sabéis lo que adoro el país de las
sonrisas, todo un ejemplo de buen trato al
turista. En esta ocasión me decidí
por hospedarme en el Chiva-Som,
donde lo primero que hacen es asignarte un Asesor personal de Salud y Bienestar
para guiarte por su amplia gama de terapias, variaciones nutricionales y
actividades físicas
para “auto-descubrirte”
(cosa que me encanta hacer).
Personal del Chiva-Som en Tailandia
Su destacada
arquitectura tradicional se funde con el espacio, basándose en cuatro principios: confort, estética, funcionalidad y aprovechamiento del entorno.
El complejo es muy popular en el Reino
Unido, donde ha recibido varias veces el premio Conde Nast Traveler.
Piscinas de ensueño
cubiertas y sin cubrir, una playa a escasos metros, 58 pabellones de lujo, un
trato I-N-C-R-E-I-B-L-E y un nutrido grupo de actividades me ha dejado como
nuevo (palabra).
Alto Hotel en Australia
De Tailandia, a
Australia, en concreto a la ciudad más divertida
que conozco, Melbourne,
todo un ejemplo de entorno universitario. Allí
me he alojado en el Alto
Hotel, el
primer edificio de este tipo en Australia que compensa todas sus emisiones de
carbono, o sea, que es Carbono Neutral, como los jueces (para entendernos),
por algo es el primer Hotel en recibir la prestigiosa certificación
Earthcheck Gold.
Alto Hotel en Australia
¿Cómo
lo han conseguido? Poniendo la “carne en el
asador”
y generando el 100 % de la electricidad que consumen de fuentes renovables,
utilizando Led´s
(siempre led´s),
sensores de movimiento para el aire acondicionado, recogiendo y reutilizando el
agua de lluvia en sanitarios y jardinería, con ventanas de doble cristal y puertas con
vidrio de 13 milímetros capaces de reflejar el
calor, utilizando productos cultivados
localmente (incluso tienen una colmena de la que recolectan miel), eliminando
el uso de botellas de plástico y, lo
más
importante, tienen una biblioteca en la que se pueden intercambiar libros (de
lujo).
Rainforest Inn en Puerto Rico
De Australia, a Puerto
Rico, un viaje para disfrutar de los elementos de primera mano, en un Hotel con
un encanto muy especial: el Rainforest
Inn, que fantástica
(y verde) aventura en este maravilloso paraje inmerso en la selva, que nos
prometen (y lo cumplen, doy fe) relax y exotismo a partes iguales. Lo más divertido: atravesar la selva
cual Indiana Jones con machete en mano y sombrero con alas.
Flor de Frangipani
Los propietarios del complejo se esfuerzan en integrarse en
la naturaleza de una forma muy especial, se mimetizan con ella. En la finca podremos disfrutar de una
cascada privada, de una piscina natural, de la poderosa presencia del mar del
Caribe, de multitud de especies vegetales (como las frangipanis), de pájaros vistosos y de los felices masajes de su personal.
Me asusté
un poco cuando vi que no tenían aire
acondicionado, aunque no llegué a echarlo
de menos (curioso).
Disfrutar de la naturaleza de Puerto Rico es uno de los alicientes del Hotel
De Puerto Rico, a
Estados Unidos, un radical cambio de ambiente me llevó
a entrar por las puertas del Intercontinental
Miami, lujo de primera (si es que en el
lujo hay categorías,
claro) y compromiso medioambiental de primera (también).
Sólo
así
se explica que sea el mayor consumidor de energía
eólica
de Florida, además,
han construido una granja para proveer a su Chef de productos ecológicos.
Intercontinental Miami en Estados Unidos
En honor a la verdad, aprovechando que está
en el distrito financiero, abandoné varias
veces la majestuosa torre revestida de mármol
(en sus treinta y cuatro plantas), para hacer negocios, cosa que no podía
hacer en Puerto Rico, claro. El Hotel tenía otro
aliciente más
este año
(sin contar la piscina) y es que ha sido galardonado con el Certificado de
excelencia 2.016 de Tripadvisor,
de entre 119 hoteles de Miami.
Piscina del Intercontinental Miami
De Estados Unidos
a Francia, a París,
a la ciudad de todos, al Hotel
Gavarni, frente al Sena, desde sus ventanas
puedes admirar la siempre esquelética torre Eiffel. Ha sido el primer Hotel independiente en Francia que recibe la etiqueta
ecológica Europea.
Méritos
para este galardón
tiene unos cuantos conocidos, como el uso de energías
limpias, el aprovechamiento de las aguas residuales y de lluvia o la gestión
de los residuos que se generan.
Hotel Gavarni en Francia
Pero lo mejor del Hotel es su actitud, pretenden involucrar
a sus clientes en el cuidado del Medio Ambiente. Para ello han puesto
contenedores de residuos en las habitaciones, retiran las sábanas
cuando el cliente lo indique, promueven el uso compartido de taxis con un panel
en la entrada (para contaminar menos, se entiende), hasta los trabajadores son eco-responsables utilizando el transporte público o la bicicleta. En serio,
se respira sostenibilidad en este resort.
Vistas desde el Hotel Gavarni
De Francia, a
Gran Canaria, a buscar en esta maravillosa perla del Atlántico
un espacio donde construir un Hotel, un Gran
Hotel, ecológico,
elegante, sostenible, divertido, único. A emplear los mejores materiales y sistemas
constructivos al alcance de mi mano para lograr una magnífica edificación.
Cuando lo haya finalizado os enviaré una
invitación,
y, como siempre, el aceptarla o no, será cosa
vuestra. Adiós.
Comentarios
Publicar un comentario